Las conclusiones, después de perder por 5-0 son pocas. Apenas puedes extraer cosas, aunque nos queda un largo camino de aprendizaje por delante. Sabíamos que esta segunda vuelta iba a ser dura.
Nuevo tropiezo de un Santa María al que le faltó fluidez en su juego para superar a un Sporting ordenado y que ejerció una efectiva presión en la zona medular a lo largo de de los últimos sesenta minutos de juego, solo dejando una duda al comienzo del encuentro cuando parecía dispuesto a no dejarse sorprender, pero vencida esta incertidumbre comenzó su claro dominio. Un fallo en el marcaje por parte del lateral permitió a los del Ciutat de Palma avanzarse en el marcador y poco después un error del central colocaba a los locales en la linea del triunfo fácil.Severo correctivo (pero justo) el que infligió el cuadro Sportinguista al Santa María. Se vio a un Santa María apocado, sin alma y sin rumbo. Con unos jugadores que apenas sabían lo que hacían sobre el campo ni por que llevaban un pantalón corto negro y una zamarra blanca con con detalles negros (segundo equipamiento). El equipo “blanquinegro” salió al campo apagado, sin toque ni ideas y, lo que es peor, con una sensación de que le importaba poco lo que sucediera en el partido... Y claro los delanteros del Ciutat de Palma que se jugaban mucho (el ascenso) aprovecharon la ya clásica caraja santamariera para dejar este claro marcador 5-0.
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